Blogia
es-ti

LA GRADUADA

LA GRADUADA Ayer me fui aver El Graduado, en todo el glammouroso esplendor de su estreno, repleto de caras conocidas, alfombras rojas, cava y luces cegadoras.

Me encantó.

La puesta en escena me pareció impresionante: las paredes y el telón son puertas gigantes como de armario (dejemos a un lado las bromitas fáciles) que se mueven y transforman, creando un montón de espacios diferentes en un segundo (los menos logrados, los exteriores). La LUZ, preciosa, cálida, evocadora, no sé, parecía que uno estaba en el cine. Las TRANSICIONES entre escenas, dinámicas y llenas de información, con algo super-curioso que me encantó: tradujeron a teatro algunos recursos propios del lenguaje audiovisual. Esto suena rarísimo y fatal, pero me explico: hubo un equivalente a una secuencia de montaje, para contar el paso de tiempo; y algunos ralentizados (vamos, actores y figurantes moviéndose a cámara lenta) para subrayar una acción determinada en algunos momentos. Las dos cosas, acompañadas siempre de la música de Simon y Garfunkel, wonderful. De verdad, wonderful-wonderful. Todo muy cinematográfico.

Los actores, bien (menos el Señor Robinson, que parecía que estaba de coña). PERO LO MEJOR de toda la obra es, sin duda y para mi sorpresa, OLIVIA MOLINA. Maravillosa, tierna, conmovedora, vulnerable pero firme, convincente y muuy alta -el pobre Juan Díaz-, no pude quitarle el ojo de encima cada vez que salió al escenario. Con esa voz quebrada. Cómo se nota que aún está en la escuela, y aún no ha perdido ese saber hacer las cosas bien. Suena raro, pero yo sé lo que me digo. Es increíble lo que ha mejorado esta chica. Ella es, para mí, la auténtica Graduada.

2 comentarios

ace76 -

ah, pues no me fiaba mucho de este montaje, pero si dices que está bien, será verdad. Lo apuntaré en mi lista...

Así me quito el mal sabor de boca que me dejo "El retrato de Dorian Gray", voto a bríos!

Anónimo -

eres muy buena crtítica, deberías vivir de ello